martes, 22 de enero de 2008
miércoles, 16 de enero de 2008
RACISMO Y DISCRIMINACIÓN ENTRE CAMBAS” Y “KOLLAS”
BOLIVIA: UNA SOCIEDAD DE CULTURAS ANTAGÓNICAS
Por: Maria Nela Requez Mendez
Los gestos despectivos, las entonaciones insolentes, alocuciones retóricas, gritos de furia y resentimiento de las elites políticas, burocráticas y mediáticas sobre todo del oriente contra los sectores del occidente boliviano se hacen cada vez más evidentes en diversos escenarios públicos.
Adjetivos como “indio”, “colla de…” o “camba de…”, entre muchos otros van y vienen desde ambos extremos principalmente. Pero los que más reproducen el racismo, ya sea explicita o implícitamente, son los grupos oligárquicos del oriente quienes muchas veces tratan a la gente de habla aymara, quechua u otra población indígena del país, como los desagradecidos, violadores de normas internas, criminales, sucios...Estos actos inhumanos, cometidos por gente blanca y rica del oriente se la practica en colegios, escuelas militares, mercados, oficinas públicas y privadas.
El 2007 Bolivia se polarizó en torno a la Asamblea Constituyente de quienes no consensúaron ni buscaron el equilibrio del país, sino que más velaron sus intereses personales y sectoriales. Esta situación casi llevó a un caos total entre bolivianos. Por ejemplo , los Sucrenses pidieron la capitalidad instigados por grandes empresarios del departamento de Santa Cruz y el partido de oposición (Podemos). Esta demanda regional causó una gran molestia en los paceños y Alteños quienes convocaron al cabildo, bajo el lema “la sede no se mueve”. Esta situación aumento la lucha del oriente contra el occidente. Los insultos fueron aumentándose hasta llegar a acciones extremas como el degollamiento de dos perros en Achacachi (en señal de amenaza para los prefectos de la “media luna”) y en respuesta a ello la elite política y económica del oriente califico de esta forma: “nosotros no vamos a matar perros carajo, vamos a matar Kollas de mierda”. En principio estas opiniones no son personales, sino expresiones de las acciones políticas compartidas por el grupo o sector social a la que pertenecen De esta manera podemos observar cómo el racismo y la discriminación se manifiesta en todas sus formas ya sean sutiles y duras entre los grupos en conflicto que sin duda impiden el desarrollo de nuestro país. Un sociólogo de nuestro medio (apellidado Mamani) decía que “mientras exista el racismo y la discriminación no habrá paz nacional”.
En cierta forma las expresiones del sociólogo nos llama a la reflexión. Si seguimos actuando de esa manera, no llegaremos a ningún lado y seguiremos siendo uno de los países más pobres de Latinoamérica y el mundo.
“Kollas” y “Cambas” debemos tomar el camino de la armonía social y no ponernos en contra de unos a otros o imponernos normas autonómicas departamentales que pretenden dividir al país y no así como dicen los empresarios y los partidos políticos de oposición bajo el argumento de que se quiere “… un país unido y democrático”. Ese planteamiento es una vil mentira, pues, ellos son grandes empresarios y solo velan sus intereses políticos y económicos y gozar de un mejor vida y todo esto a costillas de quienes son los mas necesitados. La violencia genera mas violencia y esto debe terminar para buscar un presente sin discriminación ni racismo; porque la unión hace la fuerza como dice el símbolo de la moneda boliviana. Frente a estas actitudes negativas que sufre el país
¿Cómo debe ser el papel de las instituciones educativas formadores y trasmisoras de ideologías en nuestro país? ¿Qué acciones debería hacer el Gobierno actual para disminuir esta sociedad racista todavía vigente?
jueves, 3 de enero de 2008
LOS "PAJPAKUS" DE LA CEJA (El Alto)
Por: Raul Catari Yujra*
"Mire joven, cholita, acerquese le voy a mostrar algo que le va a interesar...", es uno de los niveles de discurso conversacional que aplican los "pajpakus"en los dias de aglomeración de la Ceja de El Alto. Sus mensajes sutiles y persuasivas de estos "señores" se asemejan a algunos progamas deportivos que comercializan productos desde la pantalla chica, o a cualquier vendedor ambulante en las ferias a campo abierto y cerrado.
El ser "pajpaku" es una cualidad innata de pocos entre muchos. Pocos tienen la misma astucia, estrategia o táctica para convencer y conquistar con el poder de la palabra como lo hacia Simon Bolivar o Hitler u otros personajes "immortales" del pasado.
Aparte de ser un oficio es una estrategia de sobrevivencia personal. Sus discursos también causan gracia en los asistentes que les rodea. Calor o frio, oscuridad o claridad, estos personajes que conocen casi toda Bolivia, como pocos, siempre están con el rostro sonriente.
El ser "pajpaku" es una cualidad innata de pocos entre muchos. Pocos tienen la misma astucia, estrategia o táctica para convencer y conquistar con el poder de la palabra como lo hacia Simon Bolivar o Hitler u otros personajes "immortales" del pasado.
Aparte de ser un oficio es una estrategia de sobrevivencia personal. Sus discursos también causan gracia en los asistentes que les rodea. Calor o frio, oscuridad o claridad, estos personajes que conocen casi toda Bolivia, como pocos, siempre están con el rostro sonriente.
La estructura discursiva de los “pajpakus”, parte de una breve introducción improvisada a fin de captar la atención de los transeúntes, para este objetivo todo objeto o materia (huevos, tomates y hasta monedas) es muy ineludible, e incluso tienen que lanzar fuego por la boca, bailar o hacer algún espectáculo irónico. Después de “imnotizar” o reunir gente a su alrededor, se adentran en la presentación o teorización sobre alguna temática o producto, y finalmente incitan a la gente a que compren dicha mercadería prefijada. Estos tres elementos, aunque genéricos, se constituyen en pilares al interior de sus discursividades conversacionales.
* raulcatary@gmail.com
Suscribirse a:
Entradas (Atom)